El espíritu de ayuda cobro forma legal y organizada en 1522. Desde entonces, es una máxima dentro de la Hermandad.
Por ello y a través de la Vocalía del Limosnero, siempre se han atendido casos personales con el fin de paliar en la medida de lo posible, la situación personal desafortunada o buscar ayudas y vías, para dar soluciones efectivas a nuestros Hermanos.
Si te encuentras ante una situación complicada, ponte en contacto con el Hermano Limosnero: